Da. Olga Cossettini
Su deceso
Con la misma seriedad con que transcurrieron los últimos años de su vida, Olga Cossettini, la maestra eminente, amada de los niños y admirada por los mayores, dejó de existir en nuestra ciudad, en esa relativa soledad que dan los niños años, sobre todo cuando se han vivido intensamente.Hace dos años, Olga Cossettini, fue declarada por la Municipalidad "Ciudadana Ilustre de Rosario", rescatándola de la sombra que implacablemente se iba cerrando sobre su extraordinaria personalidad, un acto administrativo reivindicaba su imagen de aquel otro, injusto y caprichoso, de que fue víctima en 1950 cuando, a despecho de su valiosa obra, fue dejada cesante de su cargo en la Escuela "Gabriel Carrasco", de Alberdi. Desde 1.935 hasta su cesantía, Olga Cossettini, estuvo al frente de la escuela experimental "Gabriel Carrasco", imprimiéndole su estilo, dentro de un marco de libertad, donde los niños llegaban a desentrañar las leyes de la naturaleza analizando directamente sus fenómenos, observando el cielo, siguiendo día a día el germinar de las semillas y el desarrollo de las plantas, introduciéndose con la inocencia y sabiduría en los misterios de la fecundación. Esa escuela asombró a ilustres visitantes: a Juan Ramón Giménez, a Ernesto Sábato, a Gabriela Mistral, a Juan Mantovani, a Benardo Canal Feijóo, a Emilio Mira y López, a Margarita Xirgu, y a tantos otros representantes del arte y de la cultura universales. Claro está que Olga Cossettini tuvo actuación descollante en otros ámbitos culturales: desde 1.955 hasta 1.957 fue inspectora de escuelas de la provincia de Santa Fe; en 1.958, directora general de escuelas de la provincia de Buenos Aires; al año siguiente, experta en formación de maestros en Honduras; desde 1.955 hasta 1.964 fue asesora de Extensión Universitaria de la UNL, sección Rosario; de 1.961 a 1.966, asesora de la editorial de la UBA y, paralelamente, secretaria de relaciones de la Junta Ejecutiva de la Comisión de Homenaje a la Ley 1.420. Su labor fue conocida en el extranjero; representando al magisterio en el Congreso Americano de Maestros, realizado en México en 1.946, y al gobierno argentino, ante el Congreso de Planificación de la Educación organizado por UNESCO y la OEA, en 1.959, en Washington.
Estudió métodos modernos de la educación en los Estados Unidos, becada por la Giggenhein Foundation en los años 1.941 y 1.942, e invitada por el Consejo Británico, en 1.961, realizó un viaje para conocer establecimientos educativos para adultos. Recorrió también centros educativos de Francia e Italia.
Dejó varias obras publicadas, entre ellas "Escuela Serena", fechada en 1.935, donde analiza sus experiencias en el departamento de Educación de la Escuela Normal "Domingo de Oro", de Rafaela, "El niño y su expresión", "Lenguaje y lectura en primer grado", y "Escuela Viva, estas tres últimas con el marco de su actividad en la escuela "Gabriel Carrasco". El filósofo Francisco Romero, al prologar "Escuela Viva", escribió lo siguiente:"La tarea del educador, más que introducir saber o normas desde afuera, consiste en sacar a la luz el hombre esencial, en revelar al hombre su propio ser escondido, en ponerlo en condiciones de que se afirme y actualice, en mostrarle la cultura como cosa entrañablemente suya, en reconciliarle con los demás y con la historia por las raíces comunes e idénticas. Lo más admirable para mí en la Escuela de Olga es que allí ocurre en modo eminente ese doble misterio del reencuentro y de la reconciliación".
Olga Cossettini dictó conferencias en Argentina, Uruguay, Chile, México, Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia e Italia. Bregó intensamente por la modificación de sistemas estructuralmente caducos y dio con su vida una fundamental lección humanística.Había nacido en San Jorge, el último año del siglo pasado, obteniendo su diploma de maestra en 1.914. A Rosario llegó en 1.935 y desde aquí proyectó su magnifica obra. La ceremonia del sepelio tendrá efecto hoy, a las 10 hs., en el cementerio La Piedad. Sus restos, por una determinación expresada hace muchos años, serán cremados.
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